PREVISIONES MUNDIALES DE OFERTA Y DEMANDA PARA GRANO, HARINA Y ACEITE DE SOYA
GRANO: Las negociaciones comerciales entre EE. UU. y China continuará esta semana, y hay esperanza que haya cierto progreso a fin de evitar una escalada en los impuestos de importación. Sin duda, hay un gran interés en ambas partes para resolver el conflicto, pero parece que algunos de los problemas críticos pueden ser demasiado complejos para ser resueltos en el corto plazo.
El resultado de las negociaciones es solo una parte de la historia, lo cierto es que las existencias en soya son altas (26 millones de toneladas estimadas) y están en manos de los agricultores estadounidenses, por tal razón, es probable que los precios de la soya disminuyan debido a la alta oferta y escasa demanda del grano. Los precios actuales no dan a los agricultores estadounidenses la señal para reducir considerablemente las plantaciones de soya; Por lo tanto, existe el riesgo de un excedente de suministro aún mayor en 2019/20, si las condiciones climáticas son normales en el medio oeste de EE.UU. este verano.
En América del Sur, las pérdidas en parte severas de los cultivos de soya siguen motivando las revisiones a la baja. La cosecha de soya brasileña disminuirá a 112-114 millones de toneladas. En Argentina, todavía hay un amplio rango de estimaciones, con la Bolsa de Rosario el 1ro. de febrero fijando el cultivo en 49,1 millones de toneladas, mientras que otras estimaciones privadas rondan los 51-53 millones de toneladas. En Paraguay, la sequedad ha reducido drásticamente el cultivo de soya a probablemente solo 8,4 millones de toneladas; mientras que, para Uruguay aún se espera que la producción llegue a los 3 millones de toneladas. Los impactos alcistas de las pérdidas de la cosecha de soya en América del Sur se neutralizan en gran medida por los impactos bajistas de las importaciones y el aplastamiento de soja chinos menores a lo esperado este año.
Se estima que las importaciones de soya en China continuarán disminuyendo en el año en ene/feb 2019, en contraste con los aumentos en curso en la Unión Europea, Egipto, México, Indonesia y Vietnam, aunque en una menor proporción respecto a China.
HARINA: La temporada 2018/19 pasará a la historia como la primera campaña de comercialización en la que no se incrementa la molienda mundial de soya, aunque la producción mundial aumentó considerablemente y los suministros mundiales son abundantes.
Pero el factor bajista clave es China, el considerable descenso en el consumo interno de harina de soya viene motivando la reducción de las trituraciones e importaciones de harina. El consumo doméstico de harina de soya se ha reducido en la industria de piensos mixtos, el menor número de cerdos (en parte también como resultado de la peste porcina africana) contribuyó al revés, pero el ajuste principal provino de una reducción en la proporción de harina de soya en alimentos compuestos.
ACEITE: En este momento, las existencias mundiales de aceites vegetales siguen siendo muy altas, aunque ya han bajado algo del nivel récord de un mes antes. Estas existencias altas solo están moderando la escasez de suministro en desarrollo, en el supuesto de una desaceleración del crecimiento en la producción mundial de aceite de palma, y si Indonesia, Malasia y Brasil continúan impulsando la producción de biodiesel, habrá un déficit mundial de producción de aceites vegetales en 2019.
En el CBOT, el aceite de soya ha sido el miembro relativamente más fuerte del complejo durante las últimas semanas. La cuota de aceite de soja se recuperó hasta el 33,5% en febrero.
Fuente: Oil World Weekly